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Tomar o no tomar decisiones

Me siento orgullosa de las decisiones que estoy tomando en mi vida personal y sobretodo en mi vida en Aura; a veces parecería que no es fácil tomar decisiones, cuando en realidad sí es sencillo, muchísimo más de lo que percibimos.

Desde el minuto uno en que decidí embarcarme en el mundo del acompañamiento asistido con caballos he tenido claro cómo quería que fuera el entorno, cómo vivirían mis caballos, qué haría con ellos y qué no, y la manera en enfocar mi trabajo…

Aura estaba en un sitio precioso, en una de las maravillosas montañas del Moianès, mi parcela era de unas 2,5 hectáreas aprox., teníamos un hermoso prado y una zona fantástica de árboles.

Al principio había delimitada una pista donde realizábamos las sesiones, esa pista ya no existe, y yo me pregunto ¿qué hizo que la hubiese cuando yo no quería pista alguna?.

Los caballos comían en forrajeras que ya estaban ahí, ya no comen en forrajeras sino del suelo, les esparzo el heno por el terreno, así caminan, tienen más espacio entre ellos, comen más tranquilos… y yo me pregunto: ¿qué hizo que comieran en forrajeras cuando yo quería que comieran de esta otra forma?.

Mis caballos van descalzos, y ya hace mucho tiempo que decidí que no les domaré para monta, que no les trabajaré en pista y que no les pediré todas las cosas que supuestamente tienen que saber hacer, y yo me pregunto: ¿qué hizo que empezara a domarles cuando yo no quería domarlos?.

Y así podría seguir con una larga lista de preguntas; me resulta fascinante el hecho de que mi ser, mi esencia ha sabido y sabe perfectamente lo quiere, y sin embargo he hecho otras cosas que en realidad no quería hacer.

Todo tiene respuesta: ¿a quién/es he escuchado para tomar las decisiones?, ¿de cuántos miedos míos y que no eran míos me he apropiado?, ¿en qué creencias he basado mis actos?, ¿he confiado en mí o he dudado?, ¿he confiado en mis caballos o he vacilado?.

Llegado el momento, si no estás en tu camino, la vida se encarga de reconducirte, y si no escuchas te volverá al mismo punto una y otra vez hasta que te des cuenta por dónde sí es.

Mi idea inicial era la válida, mi esencia no se equivocaba y hoy me siento orgullosa de haber podido desprenderme de lo que no era mío, de serme fiel a mí misma y tener la valentía de hacer lo que tenía que hacer: ahora la manada ha pasado de 6 a 11 miembros y vive en libertad, han pasado de 2,5 a 37 hectáreas, han pasado de comer forraje a comer de forma natural, tienen unas condiciones de vida naturales para satisfacer sus necesitas como caballos que son.

Cada decisión tiene consecuencias, tanto si las tomas como si no. Te invito a hacerte esas preguntas a ver qué pasa.

Y bueno… Lo de vivir en una masía con 100 hectáreas y vistas al mar puede esperar, jjj

Karin

Si quieres que te acompañemos a tomar decisiones para continuar avanzando en tu vida contáctanos por e-mail a aura@auracoaching.cat o por teléfono al 667 41 93 05 (Karin)

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